Las Sociedades Musicales a la Vanguardia de la
Cultura
Resultaría muy fácil comenzar este artículo
acusando a los poderes públicos del desamparo institucional al que nos vienen
sometiendo en estos años de crísis, pero no es menos cierto que durante otros muchos
hemos sido mimados y sobradamente reconocidos por estos mismos políticos a los
que el descrédito les va llegando y minando en su credibilidad; por ello y
siendo consciente de mis palabras me centraré en la actual problemática de
nuestras Sociedades musicales y especialmente en las que conforman la comarca
de l’Alacantí.
En los útimos 20 años el esfuerzo en
nuestras bandas de música venía dirigido a cubrir un mínimo de necesidades: por
lo general comprar/reparar instrumentos, uniformes, pagar puntualmente a los
directores/profesores y adquirir partituras que estuvieran minimamente legibles
para su interpretación, los tiempos nos han hecho evolucionar hasta el punto de
cambiar drasticamente nuestro baricentro en otras cuestiones. Las escuelas de
educandos, que no son simplemente para “dar” Solfeo y saber como se hace sonar
un instrumento.
Hemos integrado aulas específicas, profesores específicos,
material didáctico, (recordais el LAZ o el método Eslava), incluso hemos
convertido nuestras bandas en aulas de formación para otros futuros
profesionales, cursos de dirección, semana de la percusión, clinic de vientos,
cursos de perfeccionamiento para solistas, conciertos con guitarristas,
cantantes, bailarinas, de bandas sonoras con luces y efectos especiales, etc,
etc..., para ello es innegable el apoyo que nuestros ayuntamientos nos han
ofrecido y que siguen manteniendo, con más o menos intensidad, pero el valor
actual de nuestras agrupaciones musicales sigue siéndo el llevar cultura
diariamente a nuestras localidades de
una manera inmediata y posiblemente más perceptible de lo que nos imaginamos.
De la misma manera que Juan que es electricista , el pasado Domingo en el
concierto hizo un soberbio solo de trompeta, Pablo que es el frutero lleva años
siendo el oboe solista e incluso es profesor ocasional de los educandos de su
banda y ya que cuando era joven no tuvo la oportunidad de ir al Conservatorio
por ayudar a su familia en el trabajo, ahora se siente muy orgulloso de ver
como los mas jóvenes adquieren esta instrucción , gracias a los medios que la
banda pone a su alcance.
Esta serie de avances tambien conllevan una
carga que quizá todavía no hemos aceptado y que nos hacen ponernos en mano de
profesionales que necesitamos atender, las nuevas disposiciones laborales, el
tema del IVA, y por si faltaba algo aparece en el horizonte bandístico una
nueva traba como es la reproducción de partituras y su legislación, para ello
existe la Asociación CEDRO http://www.cedro.org/, que se va a encargar en lo sucesivo de hacernos
saber y hacernos pagar (por supuesto) cuantas partituras fotocopiemos u obtengamos de manera no
acorde a los canales de Editores, distribuidores y demás hasta llegar al músico
y al oyente. Pero esto no parece ser problema para los músicos e intérpretes de
nuestras Sociedades que en peores situaciones se han visto para llevar adelante
su pasión musical. En estos momentos de insuficiencia creativa de nuestros
mandatarios, es cuando mejor están sonado nuestras bandas, gracias al esfuerzo
anterior de los que nos han precedido.